
Se acaricia mientras observa algo en el computador. ¿Qué estará leyendo?
Curva a la derecha, frenazo, bote, acelerón, izquierda, frenazo, arrancada, serie de baches, ¿por qué no arreglaran los amortiguadores?....Los roces se van haciendo mas intensos y más consentidos. Tanto roce hace que mi pene empieza a coger un tamaño considerable. Ella mira, se da cuenta, me mira con una sonrisita cómplice y se acomoda apoyando su culo en mi paquete, dejando que se roce delicadamente.
No se como, noto su mano en mi polla, sin mirarme cambia la posición de mi miembro para acoplarlo entre sus glúteos. El contacto ya es pleno, ella se mueve lentamente arriba y abajo rozándose con mi pene consiguiendo que mi erección sea ya plena, noto que estoy empezando a mojarme.
Acabo de ver el lugar donde debía apearme, a pasado como una nube, ya no me molesta la gente, estoy tan a gusto, me quedo hasta que se baje ella. La chica sigue moviéndose con suavidad hasta que se da la vuelta y clava su pubis en mi miembro. Se abraza a mi cuello y con una voz muy bajita me dice.
–Creo que te has pasado la parada, has sido muy amable por ser mi punto de apoyo, me da un beso suave en los labios.
Bajó corriendo, era su parada. Me quede mirando a través del cristal como corría graciosamente mirando hacia la ventana agitando la mano.