La luna amarga, mira pasea sus dedos iridiscentes por la piel ... pero ya no basta, no siento sus largos dedos cuando el deseo avanza y deja las entrañas temblando.
Cuerpos que naufragan en frías y líquidas atmósferas
en noches gélidas, navegantes atrincherados en pequeños cascarones de nuez, velas de seda y algodón, envolturas suaves escondidas entre crepitares de leña de fuegos extraños, deseos de salir volando a través de montañas y valles lejanos....
Burbujas de tu aliento me muestran donde estás, nado hacia su origen, también me sumerjo en esa neblinosa atmósfera que siempre nos envuelve, me resulta fascinante que duendes y máscaras envueltos entre las sombras amigas de la noche estén dispuestos para hacernos huir de las realidades entre palabras, susurros y gemidos.
1 comentario:
Me ha encantado esa Luna amarga. La tristeza y la oscuridad me acaricia al leerte, me encanta como te expresas en estas letras.
Hace mucho tiempo que te seguía y hace tiempo que no había vuelto y me he llevado una sorpresa muy grata al encontrar este blog, con estos post, tan salidos del alma.
Me encantan.
Besos y susurros con dulzura
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