domingo, 25 de octubre de 2009

En un banco de la estación

Durante el trayecto al andén cruzan distraidamente las miradas.
Los ojos de ella hoy estan preciosos, bañados con un fina tela de lágrimas.
Ella espera el tren en el mismo sitio que él.
Siempre el mismo destino para los dos.

Se sientan en el mismo banco del mismo andén como ayer.
El chico ama a la chica, ella a él no.
Ella empieza a llorar mientras le cuenta la indiferencia que siente su novio hacia ella.

Él solo le dice:

- No te preocupes, yo te consolaré.

Ella no sabía que él la amaba.
El sabía que no era amado por ella.
El novio le ama a él...........................Pero mañana será otro día.

3 comentarios:

Geheugen dijo...

Se engarzarán los días como lágrimas,
como collar de perlas.
como espejos del sol que los cobija,
habrá miradas , sonrisas y palabras
que irán tomando forma.
Al fin, imperceptiblemente.
ella sabrá que no ha cambiado nada...
Excepto su corazón.

Si lujurioso, Fauno.
si romántico, Orfeo
uuuummm! Si lectora, rendida a tus palabras..
y a tus imágenes.

P.D: Me encanta como ha quedado toda la nueva estética de tu blog, muy tuyo.
Realmente te luciste!!
Un Beso.

belita dijo...

Ufff debe de ser que yo llevo muy mal eso de gimotear en hombros extraños y peor aun lo de escuchar que el elegido es otro así que me parece a mi que lo mejor es a partir de mañana mismo hacer el trayecto en autobus.

Besos

Iris dijo...

Que triste.
Pero para muchos así es la vida, o peor...

Un beso multicolor